Esta obra, a través de una serie de seis imágenes, aborda la presión que enfrentan las mujeres en familias tradicionales y elitistas, donde se espera que adhieran a ideales de virtud. El grado en que logran ajustarse a estas normas determina su valor y jerarquía dentro de la familia.
La artista también reflexiona sobre cómo estas expectativas la llevan a experimentar el síndrome del impostor, ya que las percepciones sociales sobre su rol como madre, mujer y profesional generan sentimientos de insuficiencia. Además, son las mismas mujeres quienes se juzgan entre sí dentro de la familia, vigilando constantemente para asegurar que el honor familiar se mantenga y proteja.

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This work, through a series of six images, addresses the pressure faced by women in traditional and elitist families, who are expected to adhere to ideals of virtue. The extent to which they manage to conform to these norms determines their value and hierarchy within the family. The artist also reflects on how these expectations lead her to experience impostor syndrome, as societal perceptions of her role as a mother, woman, and professional evoke feelings of inadequacy. Moreover, it is the women themselves who judge each other within the family, constantly monitoring to ensure that family honour is maintained and protected.